jueves, 22 de julio de 2010

Nivea.

Anoche,mientras me lavaba los dientes,vi en el armario un bote de crema Ni-vea.Bien,pues me dio por cerrar los ojos y probar como se sentía un ciego.Ahí me veis con los ojos cerrados y dando al aire con las manos.Horror.Nunca puedes saber si alguien te está mirando.Y ésa es una cosa que a mí me da mucho miedo.Bueno,creo que es lo que más miedo me da del mundo.Imaginaos que escucháis la respiración de alguien en vuestro oído.No quiero ni pensarlo.Y luego,¿en la calle?Yo me oriento muy bien,pero sin ver no sé si podría hacerlo.¿Y viajar? Es una de mis pasiones. Si fuera ciego no podría hacerlo. Bueno, si podría, pero, ¿para qué si no vería nada?Tampoco podría ver la cara de mi madre.Jo, con lo que yo la quiero y lo guapa que es. Tampoco puedes ver los colores,ni las formas...
La idea de ir por ahí con los ojos cerrados dejó de gustarme muy pronto.Así que me fui a la cama.Volví a cerrar los ojos. Pero esta vez para soñar.

2 comentarios:

  1. Creo que la vista sería el último sentido que quisiera perder. Es bien jodido.

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  2. Qué bonito texto Dan, me gusta el final :)
    Es cierto, yo creo que me volvería loca si perdiera la vista. No sé si has visto el capítulo de ''21 días estando ciega'', es muy triste... lo duro que resulta tener que adaptarte a la situación.
    Ojalá nunca tengamos que enfrentarnos a eso! (adiós ser diseñadores)

    Un besazo!

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